[vc_row][vc_column][vc_column_text]Alumnos de 1º y 2º de Bachillerato del Colegio Amanecer de Alcorcón acudieron en la mañana del lunes 20 de enero al teatro Buero Vallejo para asistir al homenaje que nuestra ciudad rindió a todas las víctimas del nazismo en el Día de la Memoria del Holocausto, y que fue organizado por el Ayuntamiento de Alcorcón, el Centro Sefarad Israel Madrid y la Comunidad Judía de Madrid.
Hace 75 años, el 27 de enero de 1945, el campo de concentración y exterminio de Auschwitz-Birkenau fue liberado por las tropas soviéticas. Lo que allí encontraron fue “el mismo infierno en la tierra”, como declaró el general ruso que encabezaba las tropas de liberación. Muerte, desolación, hedor, enfermedad, gente palideciendo, en los huesos, con la mirada perdida y enloquecida… un verdadero campo de los horrores.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_custom_heading text=”Terrible experiencia en Auschwitz-Birkenau” use_theme_fonts=”yes”][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]Entre las pocas supervivientes de un campo de exterminio nazi se encontraba la por entonces joven de 20 años Anette Cabelli, hoy una afable anciana de 95 años, cuyo testimonio emocionó a todos los presentes en el teatro Buero Vallejo de Alcorcón.
Anette relató a los asistentes su terrible experiencia personal en Auschwitz. Nacida en el seno de la comunidad sefardí de Salónica (Gracias), nuestra protagonista fue deportada a este campo de exterminio junto a sus hermanos y su madre, a la que perdió de vista en el mismo momento de su llegada al campo, camino de la cámara de gas. Otro de sus hermanos también pereció allí.
“Las condiciones en las que vivíamos eran terribles”, explicó Anette. Y es que la muerte, la humillación y la degradación de ser humano eran una constante en Auschwitz. “Dejabas de ser una persona con identidad propia, desde el momento en el que te despojaban de lo poco que tenías, cuando te rapaban el pelo y cuando te tatuaban un número en el brazo, en mi caso el 4065. Ya no éramos personas”, subrayó con su frágil y emocionada voz.
Un millón y medio de judíos perecieron en Auschwitz, para un total de 6 millones al final de la II Guerra Mundial, víctimas de la barbarie nazi. Los nazis aniquilaron a un 75% de todos los judíos que había antes de la contienda y algo más de un millón y medio eran niños.
Pese a todo Anette consiguió sobrevivir y en una de las “marchas de la muerte”, con los rusos pisando los talones a los nazis, consiguió huir y llegar hasta líneas norteamericanas. Tras ello, ha dedicado gran parte de su vida a contar su terrible experiencia con el fin de que la humanidad no olvide la barbarie xenófoba y tome las medidas necesarias de prevención para que este tipo de tragedias, que atentan contra la Humanidad, no se vuelvan a repetir.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_custom_heading text=”Encendido de velas en memoria de las víctimas del Holocausto” use_theme_fonts=”yes”][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]Tras el relato de Anette Cabelli, se procedió al encendido de las 6 velas con las que se recuerda y honra a las víctimas del nazismo y con la que no se quiere que semejante barbarie del ser humano vuelva a tener cabida en nuestra sociedad. Como destacó en su intervención Shelly Hugler, Consejera de Cultura de la Embajada de Israel en España, “hay que seguir educando en valores a nuestros estudiantes para que entre todos acabemos con cualquier manifestación de odio y antisemitismo”.
El “Claro de Luna” de Claude Debussy, interpretado por el quinteto de la Escuela de Música Manuel de Falla de Alcorcón, puso el punto y final a este emotivo acto del que participaron y aprendieron activamente nuestros alumnos y profesores.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_video link=”https://youtu.be/_PpXGznJxS0″ align=”center”][/vc_column][/vc_row]
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