Casi en su totalidad, España está viviendo una ola de calor extrema que, además de hacer estragos en nuestro medio natural, está afectando a nuestra salud. Son muchas las personas, sobre todo mayores y niños, las que sufren las inclemencias del calor extremo, que a menudo desembocan en golpes de calor, alterando sus funciones metabólicas, pulmón y corazón y, en ocasiones, sus vidas.
Por ello, se hace necesario tomar las debidas precauciones para que el calor no incida negativamente en la población, sobre todo la más vulnerable. Y, en el caso de los bebés y los niños, estas medidas se deben extremar aún más. No hay que olvidar que los mecanismos de regulación de la temperatura corporal en los niños no son tan eficaces como en los adultos, de ahí que un golpe de calor en ellos pueda llegar a ser mortal, porque el organismo es incapaz de desprenderse del exceso de calor.
Consejos para evitar un golpe de calor en los niños
¿Y cómo se detecta un golpe de calor en los niños? Lo síntomas más comunes se manifiestan en forma de fiebre elevada, por encima de 39,5 grados, cuerpo caliente, fuerte dolor de cabeza, cansancio y debilidad, irritabilidad, vómitos, calambres musculares e incluso convulsiones y un pulso débil y rápido.
Para evitar que los niños y bebés sufran un golpe de calor, los médicos y especialistas recomiendan seguir los siguientes consejos y medidas de prevención:
- Evitar que estén expuestos al sol, jugando o haciendo deporte, y a temperaturas elevadas, sobre todo en horas centrales del día.
- Vestir ropa holgada, ligera, fresca y mejor si es de algodón, que permita transpirar el sudor.
- Hidratación permanente: Beber agua constantemente y comer abundante fruta, verdura y hortalizas frescas o hervidas.
- Cubrir la cabeza con una gorra.
- Evitar comidas copiosas.
- Evitar que estén en zonas sin ventilación o acristaladas, manteniendo las ventanas de la casa cerradas, mientras la temperatura exterior sea superior a la interior.
- Proteger la piel con crema solar de alta protección y sus ojos con gafas de sol.
A buen seguro que, con estos eficaces consejos, conseguiremos eludir los problemas que acarrea una sobre exposición al sol, sobre todo en nuestros niños. Ya sabemos de los beneficios del sol, pero como todo en la vida, la virtud esté en el término medio.
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